El apuesto jovencito Andy Reyes acude al rescate del pobrecito Junior Jones después de que le roben su teléfono en la calle. Tú o yo podríamos plantearnos llamar a la policía o tal vez perseguir al autor de su robo a plena luz del día, pero parece que Junior sólo está deseando seguir a su nuevo amigo a casa para divertirse un poco como un niño.
Puede parecer un escenario elaborado, pero la emoción exacerbada parece unir a los chicos y muy pronto el joven Junior se está besando con su nuevo amigo y disfrutando del consuelo de una deliciosa polla que chupar.
La policía está probablemente a horas de distancia, si es que alguna vez se molesta en responder a una llamada así, por lo que parece razonable que estos jóvenes suaves se conozcan con sus penes sin cortar goteando precum en sus bocas.
Sin duda, Junior se ha olvidado por completo de su teléfono en el momento en que Andy, un jovencito bronceado, le lame su pequeño coño sin pelo, pero sin duda ha superado la pérdida cuando la polla desnuda de su nuevo amigo se introduce en su húmedo agujero y empuja hacia dentro.
El pequeño Junior disfruta de una buena cucharada antes de recibir unos sensuales empujones por detrás y darse la vuelta para una buena embestida, con su polla rosa hinchada desesperada por liberarse mientras se frota y se acaricia.
El doble placer de la polla de su nuevo amigo dentro de él y su ansiosa paja le acercan mucho, pero es la promesa de una lluvia de semen de la gran carne de Andy lo que finalmente le hace salpicar su esperma sobre sus abdominales.
Al verlo, Andy no tarda en lanzar su propia e increíble lluvia de semen de su gran polla, escupiendo su cremosa y caliente esperma por todo el chico en una erupción final a la que todos nos unimos.
Podemos suponer que Junior ha conseguido el número de su nuevo amigo, ahora sólo necesita un teléfono nuevo.
