Drew Hill está hoy de mal humor. Está solo en casa, jugando con su smartphone, cuando suena el timbre. No espera a nadie, sino que corre a la puerta principal para ver quién está allí. Es el fontanero. Aleks Buldocek le dice a Drew que le han llamado para arreglar un problema de agua. Con una inesperada mirada de perplejidad, Drew le dice que sus padres están con su gemelo en un partido de hockey sobre hierba, pero que estará encantado de enseñarle lo que pasa. Aleks llega, por así decirlo, totalmente equipado para el trabajo. Se dirigen al baño para investigar el problema antes de recuperar sus herramientas… Parece que hay un problema con el grifo de la ducha, ya que el agua no sale. Pero, Drew parece ser, bueno… ¡Qué rápido puedes decir estúpido como un pomo! Cuando Aleks prueba el grifo de la ducha, ¡no hay problema! El agua fluye generosamente. Ginger, um Drew, alarga la mano y abre el segundo grifo mientras Aleks sigue de pie en medio de la cabina. Sorpresa, allí también hay agua, ¡y Aleks está empapado de ella! Torpemente, la pequeña pelirroja se ofrece a secar la ropa del fontanero. Mientras ayuda a Aleks a desvestirse, la dura erección del fontanero brota de su mono, lista para ser remendada. Considerando que ha perdido el tiempo con este aparente no-problema, le dice al torpe de pelo oxidado agradecido que se ponga a trabajar. De rodillas, Drew envuelve con sus sensuales labios aquella enorme erección. Apenas puede meterla toda. Pero el fornido y peludo Aleks deja poco espacio para los gemidos. Con confianza, da instrucciones al chico sobre lo que debe hacer y empuja con firmeza su rígida herramienta hacia delante y hacia atrás, dentro y fuera de la babeante boca del chico. El autoritario fontanero indica entonces al guapo pero irritado cabroncete que se dirija hacia el dormitorio. Drew protesta cuando entran en la habitación de su chico en vez de en la suya. Pero Aleks no quiere saber nada. Ordena a su sirviente de pelo oxidado que se desnude y lo empuja sobre la cama, con la cabeza por delante y a cuatro patas. El fontanero no necesita una caja de herramientas para este trabajo, su lengua y sus manos son más que suficientes, mientras se mete ese apretado agujero y abofetea esas mejillas sonrosadas de un rojo ardiente. La joven Drew está en éxtasis y la polla de Aleks está más que preparada. El alto fornido mantiene su postura agresiva y hunde su erección dura como una roca en el hambriento agujero del chaval. Ginger Boy gime en una mezcla de dolor y placer. La polla del tamaño de un tubo de Aleks martilla el culo del jovencito. Se hunde mientras los gemidos del chico se hacen más fuertes. Aleks le dice entonces a su chico pelirrojo que se monte a horcajadas sobre su eje mientras él se tumba de espaldas en la cama. ¡Drew lo siente! Sigue rodando, gimiendo febrilmente; su polla también está igual de dura. El aire es intenso. La follada es igual de intensa. Y también lo es la actitud autoritaria del fontanero. Lo encienden mientras Drew se tumba ahora en la cama y es martillado aún más fuerte. Aleks no se detiene ante nada. Su acción de follar lleva al chico al límite, mientras arroja su carga sobre su estómago y su pecho. Aleks sigue follando sin piedad hasta que descarga su propio líquido intenso. El chico lame los dedos cubiertos de semen del fontanero. Luego, abofeteando con firmeza al jovencito, Aleks da por terminado el día y se marcha.