Tony Milak es guapísimo, sus ojos azules y su cuerpo esbelto atraen todas las miradas y no es de extrañar que el jovencito gay Nick Danner quiera conocerlo más íntimamente. Lleva toda la mañana enviándose mensajes de texto, pero aunque Nick no es el tipo de chico que abandona a un amigo por un ligue cualquiera, su amigo Roman insiste en que vaya a divertirse un rato. Es el tipo de amigo comprensivo que todo joven necesita.
Nick no necesita que se lo digan dos veces, en un abrir y cerrar de ojos corre a reunirse con su nuevo amigo, los dos conectan al instante con besos hambrientos y manoseos codiciosos mientras se quitan rápidamente la ropa y dejan al descubierto sus sexys y apretados cuerpos.
Los dos chicos están perfectamente emparejados, dos chicos delgados y suaves con pollas duras abultadas en sus pantalones, que pronto se deslizarán entre los labios mientras los dos se chupan y se lamen mutuamente. Una pequeña paja en el pie hace que los jugos fluyan, pero cuando Tony prueba el agujerito caliente de Nick, está claro que el chico está a punto de ser rellenado con una rígida erección a pelo.
La larga y delgada polla de Nick rebota de placer mientras se la follan por detrás, la herramienta más gruesa de Tony le llena de centímetros calientes. Las cabalgadas y las cucharadas no hacen más que acercar al joven Nick al clímax, y sus esfuerzos no tardan en dar fruto cuando su polla se convulsiona y lanza un amasijo caliente de crema de jovencito sobre su suave piel.
Tony no tarda en soltar su propio chorro pegajoso, pajeándose justo en la cara de Nick, con su rosada polla soltando chorros de jugo para que el chico los saboree