Es un alma valiente capaz de interrumpir a su jefe en mitad de una importante conversación telefónica y salirse con la suya, pero está claro que el joven Tristan Wood es un tipo con pelotas, ¡perdón por el juego de palabras! Por supuesto, ayuda cuando eres una prostituta en toda regla y no tienes reparos en utilizar tus encantos sexuales para seducir a tu superior, como demuestra aquí el joven, que aborda hábilmente el natural (y totalmente comprensible) enfado de Robin Sánchez. echando mano inmediatamente de los botones de la camisa de su jefe, ¡antes de dirigirse al sur para un encuentro directo con la hermosa varita mágica del tipo mayor!
Y menudo encuentro con Wood, que le mete mano a la belleza hasta la raíz; antes de que Sánchez le devuelva el cumplido con igual entusiasmo, y proceda a rodear el culito de su subordinado en previsión de la follada hardcore que todos sabemos que se avecina. De hecho, no pasa mucho tiempo antes de que el gerente barbudo meta su hermoso palo de follar justo entre las tetonas nalgas del jovencito; a pesar de ser el jefe, quizá sea apropiado que la mayor parte de la fornicación en esta escena tenga lugar con Wood sentado en el regazo de Sánchez, como para enfatizar el estatus superior del jefe.
Quizá la mejor acción, sin embargo, se produce cuando Sánchez coloca finalmente a Wood sobre su escritorio y se lanza a una dura y desgarradora embestida en el agujero del joven, que, como era de esperar, hace que Wood se rompa las pelotas en un santiamén. El jefe marca su territorio escupiendo un buen fajo de proteína líquida en la cara del joven, ¡casi como pago en especie!