Colgado como un caballo en su ropa interior amarilla brillante, Tommy Hunter está listo para su masaje y el guapo Dan Rogers está dispuesto a complacerle. No pierde el tiempo y llena sus resbaladizas manos de aceite, pasándolas por toda la espalda de Tommy. Pero no se trata sólo de un masaje. No se trata sólo de la intimidad del tacto, sino de la sed silenciosa de acción del guaperas y del deseo de superarse a sí mismo, llegando tan lejos como pueda antes de que se produzca la más magnífica de las liberaciones. Dan no tarda en meterse en la boca la enorme polla de Tommy, chupando con avidez la gran herramienta sin cortar antes de cambiar de sitio. Tommy le corresponde dándole a Dan un masaje erótico, frotando, acariciando y tocando prácticamente cada centímetro cuadrado del cachas, incluso mientras manosea sus pollas y las de Dan. Lo que sigue es una deliciosa y apetitosa sesión de 69 con un jovencito y un tío amante de las pollas y las pelotas, ¡antes de masturbarse y escupir semilla caliente recién bombeada!
