Admitámoslo, si buscas a alguien que te enseñe a chupar pollas, una auténtica leyenda viva como Lucas Drake probablemente no sería tan mal entrenador, como descubre el cachondo principiante Beno Eker cuando sus esfuerzos en la felación resultan un poco decepcionantes. No es que le falte entusiasmo, todo hay que decirlo. Es más bien una cuestión de técnica, y haciendo señas a Joel Tamir -que hasta ahora había estado más interesado en su esfera mística que en hacer el amor con sus amigos- Drake pronto es capaz de demostrar la diferencia entre chupar pollas que es mejor olvidar y el tipo de gimnasia de garganta profunda que te dejará literalmente boquiabierto Todo ello desemboca muy pronto en una estupenda serie de escapadas orales de los tres chicos; antes de que la atención se centre finalmente en lo que debería ser la estrella principal de esta vigorosa actuación, a saber, el insaciable culito de Drake. Por supuesto, cualquiera que haya visto alguna vez en acción a este putilla sabrá que es un chico que nunca conoce realmente el límite cuando se trata de la atención del pene a sus tripas; y no hace falta decir que no es el momento en absoluto antes de que demuestre sus credenciales una vez más lanzándose simultáneamente sobre Eker y Tamir para el tipo de escapada de doble polla que os encanta a los gilipollas. Y créenos, no vas a quedar decepcionado de ninguna manera, ya que Drake consigue que su hambriento trasero sea estirado al máximo no en una, sino en dos posturas, antes de cubrirse la cara con el semen de su compañero, ¡y luego premiar a Tamir con su propia explosión facial!
