Creo que todos estamos de acuerdo en que tener al guapísimo joven Finn Harper como chico de la piscina sería excusa suficiente para que los tíos privados de piscina empezáramos a cavar un agujero en el jardín trasero. Está guapísimo con sus calzoncillos azules y es demasiado tentador para que el rubio Marcel Boyle lo ignore cuando llega para hacer una limpieza innecesaria.
Parece que está pescando hojas, pero está claro que busca atención, que recibe a cubos del excitado joven Marcel, con sus manos curiosas explorando el bulto que crece en los calzoncillos del chico de la piscina .
Con un poco de torpeza, los preciosos nuevos amigos se dirigen a la comodidad del sofá, donde sus rígidas y jóvenes erecciones se deslizan rápidamente entre unos labios hambrientos. Finn, un chico bronceado, recibe una buena mamada de su nuevo amigo antes de disfrutar de un bocado de la carne húmeda de Marcel.
Las tareas de la piscina se olvidan rápidamente y, tras probar el morreo del chico pálido, la joven bomba bronceada está lista para hundir su carne cruda y húmeda en su interior, follando al afortunado Marcel por detrás y dándole al chico una vuelta sobre su soberbia erección antes de penetrarlo a fondo con Marcel de espaldas.
Finn ayuda a su amigo a chorrear esa crema antes de lanzar a su propio chico de piscina sobre la bonita cara de Marcel, dándole al chico una probadita de su jugosa sustancia viscosa.
Un último chapuzón en la piscina borra la evidencia de su traviesa sesión de juegos.
