Kris Blent y Ray Mannix tienen un dilema. ¿Deberían marcharse e ir a patinar? ¿O aprovechan la piscina del padre de Blent? Al final, la tentación del agua es demasiado fuerte para ellos, tanto que se tiran a la piscina con toda su ropa de skater Aunque hay que decir que no les dura mucho. Al fin y al cabo, los dos chicos están muy excitados desde el principio, y antes de que te des cuenta, se están arrancando la ropa el uno al otro para poder acceder a las partes que cuentan
Basta con decir que Blent, en particular, se muere de ganas de meter su apretada boquita holandesa alrededor del hermoso calibre de Mannix, chupando su preciosa longitud con verdadera energía, antes de que ambos chicos se dirijan a la piscina para poder seguir retozando fuera del agua. Es en este punto, por supuesto, cuando la intensidad de la escena sube varios grados, con ambos tíos ansiosos sobre una camilla de masaje, antes de que Blent ceda finalmente a la tentación definitiva y se meta por el culo cada centímetro de la polla de su compañero
Un fabuloso espectáculo de fornicación gratuita por parte de la belleza rubia y su amigo de Praga, que sin duda sería más que suficiente para satisfacer incluso a los más fervientes aficionados al porno, pero que sólo mejora (¡si eso es posible!) cuando los dos amigos cambian de papeles. Todo esto se traduce naturalmente en que los dos amigos lampiños eyaculan el uno sobre el otro. Luego, como si aún no estuvieran satisfechos, ¡completan la actuación meándose uno encima del otro por turnos! En resumen, ¡una puta maravilla!
