Sabemos que el Maestro es muy misterioso: lleva una máscara y una capa negra, se esconde y le encanta jugar. Y ahora, el misterio se desvela. El Amo aparece en mitad de la noche delante de Jack y Félix, que están dormidos en sus camas con sólo sus suspensorios y sus cucharas. Ha llegado el momento de ponerlos a prueba. El Amo los despierta con un nuevo juego, una competición para ver quién puede darle más placer. Los chicos se meten el enorme miembro en la boca al mismo tiempo, desesperados por chuparlo: realmente hacen falta dos bocas para darles placer. Una se ocupa de los testículos y la otra del tronco y el glande. A los chicos les encanta este juego y se nota. El Maestro los tiene hechizados y no revela su identidad, dejándose puesta la máscara. Cuando las cosas se ponen difíciles, Jack se rinde para darse el gusto. El Amo les hace penetrarse mutuamente, y los chicos gimen de placer mientras se follan mutuamente en un hermoso pincho.
Es el juego de sus vidas. ¿Quién gana? Luego le toca penetrar al Mestre, y lo hace con su pene gigante. Esto no dejará a los chicos con las ganas, al contrario, la competición será muy satisfactoria para todos. ¿Quién consigue el esperma? ¿Quién consigue su primer orgasmo? Es una competición divertida en la que gana quien sienta más placer. Sin duda, tú también querrás jugar con ellos.