Arthur Kral se siente un poco triste y cansado del mundo… ¡pero no te preocupes, Erik Franke parece saber exactamente qué le devolverá la sonrisa a su atractivo rostro! Basta decir que los esfuerzos del jovencito obtienen rápidamente una respuesta inmediata, aunque, sinceramente, no hay muchos gays que no se animen ante la idea de excitarse con esta putilla rubia tan cachonda. Y admitámoslo, Franke deja bien claras sus intenciones desde el principio: mete la mano en los pantalones de Kral y le agarra la polla con el tipo de entusiasmo y gusto que nunca se ve en un chico que vive para la polla.
Es una decisión que gana inmediatamente la aprobación de Kral, eso seguro. Antes de que te des cuenta, las dos bellezas se están dando un festín por turnos; luego se colocan para iniciar un aventurero 69 que acaba con cada chico follándose simultáneamente al otro. No es de extrañar que ambos sonrían, pero es Franke quien sonríe más cuando Kral introduce su hermosa y gruesa polla sin cortar entre las nalgas de su amigo.
Comienza entonces una sesión de sexo duro, crudo y sin respiración, que proporciona al joven vagabundo toda la estimulación que pueda desear, mientras Kral se lo folla en toda una serie de posturas, antes de terminar escupiendo sobre la cara de Franke. Sólo le queda a Franke devolverle el favor, con mechones de semen aún en el pelo, mientras blanquea las facciones de Kral con el mismo entusiasmo. ¡Un beso pegajoso final entre estos dos ángeles de rostro fresco constituye una envoltura que no olvidarás!
