¿Quién iba a pensar que el sexy colegial Jaxon Radoc tendría un secretito sucio? No, no el hecho de que viva literalmente para las pollas, ¡demonios, ése es probablemente el secreto peor guardado del mundo! Sino su afición a fumar a escondidas, un vicio que oculta bien a sus compañeros hasta que un tal Orlando White le pilla arrastrando un pitillo a uno de los lavabos del colegio.
En ese momento, por supuesto, White podría ir corriendo a ver al director para ganarse unos cuantos puntos. En lugar de eso, White decide que a Radoc le sentaría bien tener otra cosa en la boca y le exige que deje de fumar y empiece a chuparle su carnosa polla sin cortar, una orden que nuestro héroe deportista cumple de inmediato (y de forma característica)
Sin embargo, pronto se hace evidente que las intenciones de White no se centran únicamente en la boca de su compañero, ¡por muy tentadores que sean esos labios! No, este moreno quiere enterrar su polla en el hambriento culito de Radoc; y, tras tomarse unos instantes para tragarse la polla de su colega, ¡vuelve al asiento del conductor y empuja cada centímetro de su polla en el siempre dispuesto esfínter australiano! Una maniobra que, en lo que concierne al joven Radoc, le pone inmediatamente a tono, ya que una vez más ofrece el tipo de exhibición de bala que tanto esperábamos y nos encantaba. Y lo mejor de todo es que está recibiendo la corrida de White en su carita Caliente, pegajosa y sudorosa, ¡ésta es exactamente la clase de suciedad que te encantará!
